Hubo dinosaurios de todos los tamaños y aspectos. Comprobemos cómo estaba adaptado cada uno a su forma particular forma de vida. Los distintos tamaños y formas de los dinosaurios evolucionaron para adaptarse al modo de vida de estos animales. El diminuto y ágil Compsognathus se alimentaba de pequeños animales, y era lo bastante rápido como para atraparlos. El Allosaurus era un enorme y feroz dinosaurio, mientras que el diplodocus podía alcanzar con su largo cuello las hojas a las que no llegaban otros dinosaurios.
Gigantesco y lento
El Diplodocus tenía un cuello y una cola muy largos, y alcanzaba los 27 metros de longitud. Su cuerpo era delgado y su cabeza, pequeña para semejante tamaño. El Diplodocus necesitaba ingerir enormes cantidades de alimento para sobrevivir, y su colosal estómago podía digerir todo tipo de hojas.
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Minúsculo y veloz
El Compsognathus es uno de los dinsaurios más pequeños que se han descubierto hasta la fecha. Era carnívoro, pero pesaba poco y podía correr a gran velocidad. Era un hábil depredador que se alimentaba de lagartos e insectos.
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Grande y musculoso
El Allosaurus, parecido a un dragón de cuento, era un feroz carnívoro. Su complexión era robusta para poder atacar y matar. No era muy rápido corriendo grandes distancias, pero probablemente atrapaba otros dinosaurios más pequeños, jóvenes o lentos, o bien se alimentaba de carroña (animales muertos).
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